“Hermano…: hazme milagros”

Díjole un pseudo – organizador de conciertos a nuestro guitarrista, mostrándole un guitarra sin una cuerda, sin cables ni amplificador, en tiempos pasados cuando éramos ZAQUEO, sinceramente, ese concierto nos pareció una negligencia total, invitar a un grupo de rock (Misionero) como nosotros, que nos burlamos justamente de las hipocresías (moralidad plástica o imitada) haciendo crear una inquietud en los corazones seculares...y ahora tocar en un concierto de “Alabanza!!??", creo que estábamos un poco fuera de lugar no?....en primer lugar, el público sobrepasaba la edad de 40 años, y solo habían grupos de alabanza…

Claro, no es porque somos unos niños engreídos especiales que no tocamos si no hay “ ofrenda”, sino que somos un grupo de Rock y utilizamos los implementos necesarios para ejecutar el Rock (Guitarras y mucha distorsión) pero al ver en el escenario que no habían nada de cosas solo un teclado y una batería (por supuesto q en ese tiempo, dependíamos de la propina dominical de nuestros padres y no podíamos comprarnos equipos ni instrumentos) decidimos claudicar y no tocar, cuando le informamos al “hermano” que nos íbamos, se indignó, y nosotros le dijimos: “pero hermano no podemos tocar no hay cuerdas en las guitarras!!”, después de muchas súplicas y repetidas explicaciones agotadoras, ahí es cuando el hermano aplicó su ultima arma y gran frase que se me quedó para siempre guardada y que es producto de estas líneas: “Hermano…, en le nombre de Dios, házme milagros con este instrumento..”, todos nos miramos, en silencio, algunos de los chicos querían reírse, pero se aguantaron porque sabían perfectamente que si uno se ríe contagiará a los demás y parecerá que todos nos burlamos de él, esperamos que el dichoso instrumento se convierta en un arpa celestial o en una verdadera Les Paul pero no paso nada, seguía siendo una guitarra sin cuerdas, y en el mango tenía un sticker plateado de colores tridimensionales que decía…”hoy no se fía, mañana sí”, entonces el hermano con tan sólo un gesto de decepción y nosotros también quién de paso nos había llevado a Namekusein a tocar, un lugar que en vez de postes de luz tenía barriles de brea prendidos a manera de antorcha, tuvo q darnos para nuestros pasajes de vuelta…de haberlo sabido en mi joven y corta vida recorrida, no hubiera aceptado, todo por una llamada misteriosa, hasta ahora culpo a quien le dio mi teléfono a ese hermano….De repente Dios no quería q toquemos ahí…

Moraleja: “…No todos los contactos, son una oportunidad…”

-Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia-

Marcos Bravo
Lead Guitar de la Banda