no judas tío veneno!

Relato sobre los tios y tias sangucheros, esos seres que se desvelan muchas noches por dar un pan de comer a los borrachos, taxistas, universitarios y demás gente nocturna...


Terminaba el ensayo, como es habitual, en casa de Marcos, y como también es habitual, me dio hambre... a duras penas Marcos Y Benji Bravo -cuñado de Marcos y guitarrista del grupo- se animaron a ir, asi que luego de dejar algunas cosas, salimos rumbo al tío poison. Era la primera vez que iba a ese tío poison, y tenía la idea de que "tío veneno es veneno donde sea"...

Mientras pedimos cada uno (yo pedí un sanguche de chorizo), hablábamos de las experiencias gastronómicas extrañas que algunas veces nos suceden, tal como uñas en la sopa y pelos en la comida. De rato en rato veía a mi futura comida en el carrito del tío veneno, tomando cada vez un color más brillante gracias al aceite. También veía las papas, nadando alegremente en un mar oscuro (me imagino que el aceite tenía muchos días ahi) tornándose cada vez más doradas.

En eso, la clásica conversación sanguchero-cliente:

-"joven, que cremas desea" (xq rayos no le dicen salsas?)
-"mmm.. sólo aji x favor"

CRASO error... como me dijo una amiga, parece que me tocó la pepita del ají...

-"cha q rico sanguche, cóbrate tío," (le doy dos soles y termino el sanguche en 2 minutos)

Me despedí, y me fui feliz...

A las dos horas me estómago daba vueltas y ardía como el mismo infierno, es más, creo que si abría la boca, se escuchaba highway to hell de AC/DC (si, ese, otro grupo del cual rajaban tus maestros en las reuniones de adolescentes). No me quedó otra que sentarme en el trono y expulsar el demonio...

Asi que el día de hoy... no he hecho más que tomar té todo el santo rato...

(en la foto, el tío poison del billar, culpable de mi desastre estomacal)